Thalia es una de las figuras más emblemáticas en América Latina, su música ha traspasado las fronteras, sus novelas han sido dobladas en un centenar de idiomas, su imagen representa la influencia de la mujer latina en los Estados Unidos, aquella que con trabajo y perseverancia logra abrirse paso en una industria tan competitiva como lo es la del entretenimiento.
Aunque el tiempo ha pasado, desde la primera vez que tuvimos la oportunidad de verla en los escenarios cantando al ritmo de la popular banda Timbiriche su legado musical, se encuentra más vigente que nunca.
Hoy la nacida en Ciudad de México se encuentra de fiesta, al estrenar su nuevo tema que lleva por nombre “No Me Acuerdo”, con el cual busca seducir al público juvenil, aquel que seguramente crecería escuchado en las bocinas de sus radio los éxitos de esta polifacética artista.
En compañía de la popular Natti Natasha, Thalia narra la historia, de una joven que sale un noche de rumba junto con sus amigas, pero que entre tragos y la música, comete ciertos excesos, de los cuales no puede recordar, por más que quiera recordar, un relato del cual muchas personas se sentirán en algún momento identificadas.
La intérprete mexicana revelo que desde el primer momento que escucho la canción se enamoró y que de inmediato se metió a grabarla en su estudio. Pero “mientras más la oía y más la oía y más la oía en mis bocinas, más venía a mi mente la imagen de cantarla con otra mujer fuerte, intensa, que dijera las cosas tal cual son, y pensé directamente en Natti”, exponente que conocería en la filmación del video en la ciudad de Nueva York.
La chispa fue algo natural y la complicidad entre estas dos bellas representantes latinas se daría desde el primer instante, asi lo revelaría en una entrevista para el periódico Primera Hora.
“No sé si a ti te ha pasado que de pronto conoces a alguien y tú empiezas a decir alguna frase y la otra persona termina la frase o dice una palabra al mismo tiempo, o tienes como un doble sentido muy picoso que solamente tú te entiendes y te ríes en el mismo momento. ¡Así nos pasó a ella y a mí!”, contó con entusiasmo. “Y se siente esa complicidad, esa travesura, esa picardía, ese doble sentido en las imágenes del video, en la canción y en todo momento en este junte que dimos ella y yo”.
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