Nacida en Jujuy, un provincia ubicada al Noreste de Argentina, Julieta Cazzuchelli creció en un hogar donde la música se hacía presente todos los días, su Padre era un Músico Amateur, de aquellos que dedicaban largas horas de su día a la composición y al canto.
Pasión que le trasmitirá a su hija, aquella que vería como un buen espectador, como tarde a tarde su Padre le enseñaba a tocar guitarra a su hermana, imaginándose una y otra vez como seria ser una estrella de talla mundial.
Impulsada por sus sueños, Julieta, como es su nombre de Pila, comenzaría a la temprana edad de los 15 años a incursionar en el mundo la música, aquella que al ritmo de la Cumbia, daría sus primeros pasos.
Con un ritmo autóctono de su país, Cazzu comenzaría a tocar las puertas de las emisoras de radio de su ciudad, bajo el nombre artístico de Juli K, esta joven soñadora viviría uno de los peores momentos en su vida, sentir el desprecio.
Entre la desolación y la impotencia, de ver como las puertas se le cerraban en la cara, Julieta se vería obligada a tomar una decisión que cambiaría su vida, Aquella joven soñadora que creciera en un hogar donde el arreglo de las cuerdas era el compás para acompañar las Historias de amor nunca antes contadas, se tendría que replantear comenzar de cero, en un lugar lejano, aquel donde pudiera comenzar sin tener miedo a su pasado.
Motivada por la sed de cambio y el deseo de escribir una nueva historia, aquella de la cual pudiera sentirse orgullosa, Cazzu llega a la ciudad Tucumán, para cumplir un anhelo, estudiar Cine, profesión que junto a la música siempre había sentido una extraña pero profunda conexión.
Alejada de los escenarios, pero siempre con la ilusión de volver a ellos, Cazzu se enfocaría en su nuevo proyecto, aquel al cual dedicaría gran parte de su tiempo, sus ganas de salir adelante eran notorias y pese que el viento soplaba a su favor, sentía un gran vacío en el alma, aquel que nada podía llenar.
Fue así, como por golpes del destino que llegaría a su vida una llamada que le cambiaria sus días, un amigo le había invitado a vivir a Buenos Aires, ciudad donde se estaba gestando un movimiento urbano importante, aquel que años después sin imaginárselo protagonizaría. Con un Look que simulaba a una estrella de Rock, Julieta asumiría el Rap como una bandera, como el mecanismo para drenar sus miedos y expresar sus más recónditos sueños.
Bajo el nombre artístico de Cazzu como abreviatura de su Apellido, esta joven soñadora iniciaría una nueva etapa en su vida, aquella que estaría marcada por su lucha contra el Machismo, aquel que dominaba en un movimiento promovido en su mayoría por Hombres. Dueña de un espíritu guerrero indomable, de aquellos que recuerdan a los grandes gladiadores de la época, Cazzu se abriría paso en las calles de Buenos Aires con una propuesta única, aquella que sería capaz de combinar la sutileza de su voz con el más profundo poderío de sus coros, haciendo de sus canciones verdaderas obras de arte.
Tema tras tema, aquella soñadora que desde temprana edad había sentido una conexión única por la música demostraba el gran talento que se escondía detrás de ese irreverente look, su ascenso era meteórico, su nombre comenzaba a traspasar fronteras y aunque la fama comenzaba a crecer como la espuma algo le faltaba en su carrera.
Fue así, como en una Madrugada cualquiera llega a su vida una melodía que cambiaría todos sus días, “Killa”, aquel tema donde Cazzu se mostraba como una mujer empoderada, caminando por el medio de un barrio, con una mirada directa, unas trenzas coyas, los ademanes con las manos marcando el compás y un paisaje urbano que marcaba su llegada a la ciudad, sería su carta de presentación.
Desde ese tema, esta aguerrida luchadora había logrado alcanzar la tan anhelada aprobación de sus colegas del rap, de aquellos que desde hace tiempo había admirado y que tantas veces se habían burlado de ella, su éxito era notorio, el género urbano le abriría las puertas. Con el respeto de sus colegas y la admiración del público, a mediados del año 2017, Cazzu viviría uno de los mejores momentos en su carrera, de aquellos que solo viven una vez. El tema “Loca” que colaborara junto a Khea y Duki, no solo se había convertido en poco tiempo en el single mas sonado en su pais natal, sino que era una sensación en el mundo entero, gracias a las redes sociales.
Al punto que uno de los exponentes urbanos de mayor prestigio en el genero participara en su remix, Bad Bunny, desde ese momento la carrera de Cazzu no se ha detenido.
Impulsada por sus sueños, Julieta, como es su nombre de Pila, comenzaría a la temprana edad de los 15 años a incursionar en el mundo la música, aquella que al ritmo de la Cumbia, daría sus primeros pasos.
Con un ritmo autóctono de su país, Cazzu comenzaría a tocar las puertas de las emisoras de radio de su ciudad, bajo el nombre artístico de Juli K, esta joven soñadora viviría uno de los peores momentos en su vida, sentir el desprecio.
Entre la desolación y la impotencia, de ver como las puertas se le cerraban en la cara, Julieta se vería obligada a tomar una decisión que cambiaría su vida, Aquella joven soñadora que creciera en un hogar donde el arreglo de las cuerdas era el compás para acompañar las Historias de amor nunca antes contadas, se tendría que replantear comenzar de cero, en un lugar lejano, aquel donde pudiera comenzar sin tener miedo a su pasado.
Motivada por la sed de cambio y el deseo de escribir una nueva historia, aquella de la cual pudiera sentirse orgullosa, Cazzu llega a la ciudad Tucumán, para cumplir un anhelo, estudiar Cine, profesión que junto a la música siempre había sentido una extraña pero profunda conexión.
Alejada de los escenarios, pero siempre con la ilusión de volver a ellos, Cazzu se enfocaría en su nuevo proyecto, aquel al cual dedicaría gran parte de su tiempo, sus ganas de salir adelante eran notorias y pese que el viento soplaba a su favor, sentía un gran vacío en el alma, aquel que nada podía llenar.
Fue así, como por golpes del destino que llegaría a su vida una llamada que le cambiaria sus días, un amigo le había invitado a vivir a Buenos Aires, ciudad donde se estaba gestando un movimiento urbano importante, aquel que años después sin imaginárselo protagonizaría. Con un Look que simulaba a una estrella de Rock, Julieta asumiría el Rap como una bandera, como el mecanismo para drenar sus miedos y expresar sus más recónditos sueños.
Bajo el nombre artístico de Cazzu como abreviatura de su Apellido, esta joven soñadora iniciaría una nueva etapa en su vida, aquella que estaría marcada por su lucha contra el Machismo, aquel que dominaba en un movimiento promovido en su mayoría por Hombres. Dueña de un espíritu guerrero indomable, de aquellos que recuerdan a los grandes gladiadores de la época, Cazzu se abriría paso en las calles de Buenos Aires con una propuesta única, aquella que sería capaz de combinar la sutileza de su voz con el más profundo poderío de sus coros, haciendo de sus canciones verdaderas obras de arte.
Tema tras tema, aquella soñadora que desde temprana edad había sentido una conexión única por la música demostraba el gran talento que se escondía detrás de ese irreverente look, su ascenso era meteórico, su nombre comenzaba a traspasar fronteras y aunque la fama comenzaba a crecer como la espuma algo le faltaba en su carrera.
Fue así, como en una Madrugada cualquiera llega a su vida una melodía que cambiaría todos sus días, “Killa”, aquel tema donde Cazzu se mostraba como una mujer empoderada, caminando por el medio de un barrio, con una mirada directa, unas trenzas coyas, los ademanes con las manos marcando el compás y un paisaje urbano que marcaba su llegada a la ciudad, sería su carta de presentación.
Desde ese tema, esta aguerrida luchadora había logrado alcanzar la tan anhelada aprobación de sus colegas del rap, de aquellos que desde hace tiempo había admirado y que tantas veces se habían burlado de ella, su éxito era notorio, el género urbano le abriría las puertas. Con el respeto de sus colegas y la admiración del público, a mediados del año 2017, Cazzu viviría uno de los mejores momentos en su carrera, de aquellos que solo viven una vez. El tema “Loca” que colaborara junto a Khea y Duki, no solo se había convertido en poco tiempo en el single mas sonado en su pais natal, sino que era una sensación en el mundo entero, gracias a las redes sociales.
Al punto que uno de los exponentes urbanos de mayor prestigio en el genero participara en su remix, Bad Bunny, desde ese momento la carrera de Cazzu no se ha detenido.
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