Antes de colaborar con el ídolo español Enrique Iglesias, en la versión remix del tema “Después que te perdí”, antes de recibir su primera nominación a los Premios lo Nuestro, antes de publicar su primera Album, en compañía de la leyenda urbana Baby Rasta, Jonathan Resto Quiñones, era un joven como cualquiera, en su natal San Juan, Puerto Rico.
Nacido en el seno de un hogar, donde las necesidades estaban a la orden del día, Jonathan, como es su nombre de pila, crecería en un hogar donde la música, se haría presente cada uno de sus días, en buena parte por la influencia de sus padres,
Su Padre, un virtuoso baterista aficionado y su madre, una devota cristiana, que combinaba, la oración, con el canto, la enseñarían, desde temprana edad, al pequeño Jonathan, un profundo amor, hacia el mundo de las artes, aquellas con las cuales, con el tiempo se dedicaría.
Dueño de un estilo fresco, a la hora de rapear, Jon Z, iniciaría su camino en la música, formando parte del dúo Enver y Jarel, un binomio que pese a contar con un equipo de promoción en las redes sociales, no dudaría mucho, debido a la poca capacidad de atraer a los oyentes del género urbano, a una propuesta carentes de sonidos atrapantes.
Desilusionado, por su primer fracaso musical, Jonathan enfocaría cada uno de sus pensamientos, en su familia, aquella formaría a la temprana edad de los 17 años, cuando tomaría la determinación, de contraer nupcias con su novia de la escuela.
Desde ese momento, la vida, del nacido en San Juan, pero criado, desde muy pequeño, en el popular caserío de Humacao cambiaria, ahora tendría una gran responsabilidad, en sus espaldas, aquella a la cual no podía defraudar.
Con trabajos de guardia de seguridad en la franquicia internacional Subway y repartidor de pizzas, en una popular pizzería, de su caserío, Jon Z, se alejaría, de forma temporal, del mundo de la música, aquel que tantas ilusiones les había causado en el pasado.
Seria, cuestión de tiempo, para que aquel adolescente que crecería en un hogar, donde la música era una forma de expresar la Fe, se reencontrara, con su primer amor, la música.
Impulsado por un amigo cercano, Jonathan encontraría en el movimiento de Freestyle Manía, una forma de darle vida a sus sentidos, aquellos que se verían reflejados en cada verso o improvisación, que el intérprete de área oeste, era capaz de trasmitir, en cada video.
De esas guerras liricales, nacería una estrella, aquella que sería capaz de vencer, los infortunios del destino, para comenzar a brillar con luz propia.
Con un nombre, reconocido en los caseríos, Jon Z, comenzaría apostar en las páginas que cubren la actualidad del género urbano, como mecanismo para promocionar su música, aquella que aún no era capaz de llegar a las emisoras de radio, mas importantes de la isla.
Seria con el tema 0 Sentimientos que el niño que creciera bajo el evangelio, saltara a la fama mundialmente, en un tema que su versión remix, contaría con la participación de exponente de la vieja y de la nueva escuela, como Baby Rasta, Noriel, Lyan, Darkiel, Messiah.
Hoy por hoy, Jon Z, es uno de los exponentes mas reconocidos mundialmente de la nueva escuela, por su irreverente forma de rimar y por sus canciones cargadas de jocosidad.
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