Su estilo emula a los más reconocidos cantantes de pop, de todas las épocas, su forma de cantar, nos transporta a un universo, donde los problemas, parecieran ser cosa del pasado, su voz, es el remedio, para todos los males y aunque, aún es muy joven, Mati Gómez, ya es una sensación, en el ambiente de la música urbana.
Proveniente de un hogar, de clase media, donde la música, estaría presente, cada uno de sus días, el pequeño Mati, crecería con la ambición de convertirse en una estrella de fama mundial, de aquellas, que en su pequeño televisor de su cuarto, ya comenzaban a llenar, los escenarios más emblemáticos, de su país.
Amante de la naturaleza, del deporte, y un romántico sin remedio, el nacido en Santiago de Chile, a mediados de año 1999, dejaría a un lado su trabajo como obrero en una planta de residuos tóxicos, para comenzar a vivir su más anhelado sueño.
Con el tema “Yo no sé”, este soñador chileno, se presentaría al mundo entero, bajo el apadrinaje, de una de las compañías más importantes en la industria de la música latina, como es la industria inc.
Bajo los sabios consejos del exponente boricua Nicky Jam y el impulso de su equipo de trabajo, este joven estudiante de Educación Física, dejaría el anonimato, para comenzar a vivir, un sueño que hoy no tiene fronteras.
Siempre agradecido por las puertas que se han abierto en el camino, siempre optimista por las decisiones que en su vida ha tomado, Mati Gomez, hoy comienza a disfrutar las mielas del éxito, aquel que llegaría a su vida, de la forma menos inesperada
Con un sencillo promocional, sonando con fuerza en las radios de américa latina y una versión remix, en compañía de la mítica banda mexicana Reik y su padrino musical Nicky Jam, Matias apunta hacia un 2020, cargado de muchas emociones y de romanticismo.
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