jueves, 4 de junio de 2020

La Historia detras de Kendo Kaponi.


La infancia para José Rivera Morales no fue un cuento de hadas, el haber crecido en un hogar donde el amor nunca estuvo presente y donde violencia se combinaba con el uso de las drogas, marcaría sin lugar a dudas, el destino y la personalidad de uno de los exponentes urbanos más talentosos en la historia del género pero más enfrentado a los problemas.

Primeros Momentos de vida:

Proveniente de un hogar, donde la mayor parte del tiempo, su Madre, se encontraba ausente o sumergida en un mundo, donde las drogas se combinaban con la falta de recursos y un Padre, inexistente, el pequeño José, junto a su hermana, batallaría, ante una realidad, desbordante.

Con un morral lleno de sueños, con un amor por la familia, capaz de traspasar las fronteras y con una tenacidad, propia de todo guerrero, el mayor de los Rivera, vería como su infancia, transcurría entre Hogares Temporales e intentos de fuga, aquellos, que serían motivados, por su deseo de reencontrarse, con su Mama, ya que sentía, que parte de que hoy estuviese internado, era su culpa.

Luego de más de 64 intentos, aquel niño que su infancia le fuera arrebatada, por las malas decisiones de sus Padres, se reencontraría, al fin con su Madre, aquella a la cual, le prometería, nunca más fallar pero ella no tenía los mismos planes.

Al poco tiempo, sería entregado por ella al departamento de infancia, sin saber el porqué, sin conocer la razón, sin tener una respuesta, su destino parecía estar diseñado, en pasar cada uno de sus días, encerrados, en una celda.

La Maldad llega a su vida, en forma de pandilla: 

Alejado, de su familia, de sus raíces, de sus querencias, José Rivera, buscaría en la calle, todo lo que en su hogar no le habían dado, seria en ella, donde rodeado de personas escrupulosas y malas amistades que entraría al mundo de las bandas criminales, aquellas donde para sobrevivir, hay que aparentar ser el más fuerte.

Comienzos de Kendo Kaponi
Rodeado de drogas y armas, el adolescente que creció, sin ningún tipo de ciudad familiar, viviría los peores momentos de su vida, aquellos que ni el dinero, ni el respeto de la calle, pudieran hacer frente.

Seria, en esa etapa de su vida, que conocería el oficio de la barbería, aquella que combinada con una habilidad natural para componer sobre el papel, verdaderas obras de arte, lo llevaría, alejarse, por un instante, de una realidad sombría.

Realidad que lo llevaría a prisión, cuando apenas tenía 13 años de edad, acusado por un caso de drogas, violación de la Ley de Armas, seria condenado a pasar seis años, de su vida, tras las rejas.

Internado, en cuarto, donde la luz del sol apenas podía verse, José, drenaría todas sus emociones, en canciones, aquellas que no podía plasmar, de la forma más convencional, sino a través de dibujos, en virtud de no saber escribir.

Evolución de Kendo Kaponi
Seria, a la edad, de los 19 años que la luz del sol ya podría ver, su condena se había cumplido y la vida, parecía, darle una nueva oportunidad, aquella que entre miedos y dudas, no dejaría de aprovechar.

La música llega a su vida, como tabla de salvación: 

De vuelta a la libertad, Kendo comenzaría a escribir con más fuerza, su aprendizaje sobre la escritura, de le permitiría, darle un nuevo enfoque a cada de sus letras, nombres, como Héctor El Father, Cosculluela, comenzaban a llamar con fuerza.

Con letras, capaces de narrar la realidad de la calle y con una habilidad natural de relatar historias de dolor y amor, Kendo Kaponi, comenzara a escribirle canciones, artistas consagrados como Wisin & Yandel, Héctor “El Father”, Cosculluela, Daddy Yankee, Baby Rasta & Gringo entre otros.

El Destino, parecía cambiar la realidad, de un joven con un pasado sombrío, la vida le daba una nueva oportunidad, a un adolescente, que lo había perdido todo, sin saber el porqué.

Don Omar llega a su vida, como un ángel del cielo: 

Como un ángel caído del cielo, de aquellos que llegan a tu vida, sin un anuncio, un aviso o una invitación, llegaría Don Omar a su vida, para cambiar, todo lo que anteriormente estaba escrito.

Bajo el apadrinaje, de uno de los exponentes más importantes en la industria de la música, aquel joven soñador, que crecería en un caserío de Bayamón, comenzaría a formar parte del Orfanato. Aquel proyecto musical, del Rey Don Omar, que lograr aglutinar, los talentos más prominentes del mercado latino, en un concepto, nunca antes visto.

Foto: Cover de Meet The Orphans
Como integrante del Orfanato, Kendo Kaponi, vivirá los mejores momentos en su carrera, con temas como “Prueba de sonido” “RX”, “Viviendo con el enemigo”, lograría llevar su nombre a otras fronteras.

Con un reconocimiento, a nivel mundial y un respeto entre sus colegas, aquel niño que pasara la mayor parte de sus días, entre los hogares temporales, vería como su apodo musical, apareciera en los anuncios de Meet the Orphans.

Aquella mítica producción, donde Don Omar tendría la oportunidad de presentar, una constelación de jóvenes talentos, entre productores y cantautores, entre ellos: Syko El Terror, Natti Natasha, Danny Fornaris, Alcover & Xtassy, su nombre destacaba.

A pesar, de que sus temas aparecían en los primeros lugares de ventas digitales, el nacido, en un poblado de Puerto Rico, no participaría, en la promoción del disco, debido a su separación de la compañía, por su insistencia en retomar, las andanzas del pasado.

Su pasado, se vuelve su presente: 

Rodeado, de las mismas personas que tanto daño le habían causado, en años pasados, Kendo Kaponi, echaría por la borda, un contrato millonario, aquel que pudiera sacarlo, de una vida, llena de dificultades.

Los años seguirían pasando, sus canciones no tendrían la misma fuerza, de épocas pasadas, la prensa solo hacia eco, sobre sus problemas con la justicia, un talento, parece que se había perdido, hasta que un día, su libertad exploto. Kendo, había sido arrestado por las autoridades por un cargo de violencia, aquel que le costaría, 2 años de su vida.

En prisión, miles ideas y recuerdos llegarían a su cabeza, sus anhelos, de poder dejar su pasado atrás, lo harían más fuerte y lo volcarían a drenar, todo sus pensamientos en canciones.

Una vez, en la calle, Kendo Kaponi, hoy vive una nueva oportunidad en la música y en la vida, aquella, a la cual no esta dispuesto a desperdiciarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario