La música urbana, está llena de personajes
emblemáticos, aquellos que emergieron en diferentes momentos de la Historia,
para llevar a un género marginado, desde la clandestinidad de la calle a los
primeros lugares de popularidad en el mundo entero.
Perteneciente, a una generación de jóvenes
soñadores que contra viento y marea, dejarían el alma en cada colaboración,
para hacer de un género musical underground, el más escuchado a nivel global, Eddie
Alexander Ávila Ortiz, es una leyenda, en medio de una multitud.
Apodado como el terrorista de la Lírica o
sencillamente como “El Maestro”, el nacido, en un popular caserío de Rio
Piedras Puerto Rico, irrumpiría a temprana edad, en el mundo del
entretenimiento, al aparecer, por primera vez en el programa de la televisión
Puertorriqueña “Tu Video Favorito”, donde daría sus primeros pasos, en la
escena musical.
Conocido, en sus inicios, por su etapa como Bailarín,
Eddie Alexander, encontraría en el programa producido por el Flaco Figueroa, el
lugar donde demostrar todo su potencial, aquel que comenzaría con el baile y
con el tiempo, iría incorporando el canto.
Atraído, por el mundo del Rap, aquel género,
tan presente en la cultura americana pero tan ausente en el mundo latino, el
nacido un 26 de Abril de 1977, se alejaría de su faceta como coreógrafo para
presentar a mediados del año 1994, su primer gran Album, como cantante, aquel
que llevara por nombre “Es el Comienzo”, junto al grupo The Ghetto Crew.
Con el cielo como el límite, Eddie Dee, iniciaría
una faceta que lo llevaría a participar, en diversas producciones, aquellas donde su poderosa forma de ritmar,
harían de una joven promesa, un artista de alta jerarquía, en un género que
comenzaba a dar sus primeros pasos, en el medio de las más cruel censura.
Entre participaciones destacadas, en producciones
como: Underground Records con el tema ”Todo en la casa”, M.C. Non Stop Reggae
Vol. 2 con el tema “Es tiempo de actuar”, DJ Adam – Mad Jam Live Concert, La
Parranda Rappers, U Records 4 - Back To Business, Eddie Dee, lograría
posicionarse, como una de las promesas más destacadas del Rap en Español, donde
sus poderosos versos, tendrían la fuerza
derrumbar al rival más letal.
Tema a tema, el nacido en un popular caserío
de Puerto Rico, en el medio de las más profundas dificultades económicas y
sociales, comenzaba a posicionarse en el mercado latino, aquel que a mediados
de 1997, impactaría con la producción "Tagwut", un disco donde el Hip Hop, se
mezclara con la crítica social, para hacer de una promesa, un artista de
renombre.
Con su música, sonando en los principales caseríos
de la isla del encanto, a mediados del año 2000, Eddie Ávila, lanzaría la al
mercado la producción discográfica, más importante en su carrera, aquella que
llevara por nombre “El Terrorista de la Lirica”
En compañía de los legendarios Maicol y
Manuel, del Salsero Frankie Ruiz, de un joven Tego Calderón, de unos
irreverentes Horny Man, Panty Man, OGM Y Oakley y un prometedor Coo-kee, “El
Terrorista de la Lírica”, llevaría a un joven soñador, a la cima de la
popularidad.
En medio de extensas giras y conciertos, con
pronunciados Sold Out, Eddie Ávila, lanzaría el 29 de Enero del año 2004, la producción
discográfica, más importante en la Historia de su carrera.
Bajo el nombre bíblico de los “12 Discípulos”,
el nacido, en un popular barrio de Puerto Rico, se encargaría de unir, en una
misma producción a los exponentes urbanos, de mayor impacto para la época, en
un disco para la Historia.
Con la participación de un prometedor Daddy
Yankee, de un irreverente Tego Calderón, de una leyenda como Vico C, de los
internacionales Zion & Lennox, de un versátil Nicky Jam, de un poderoso
Voltio, de la Reina Ivy Queen, del dueño del verso, Wiso G, de la realidad de
la calle, en la voz de Gallego, Eddie Dee, presentaría una producción, donde en
más de 14 temas, 12 diferentes soñadores darían lo mejor de ellos, en un disco
de otra era.
Sonando en las principales emisoras de la
isla y de varias ciudades de los Estados Unidos, Eddie Dee, vivía el momento más
dulce en su carrera, aquella, donde los logros parecían llegar a su vida, de la
forma menos esperada.
Entre nominaciones, conciertos masivos y los más
importantes titulares de prensa, había nacido una estrella, aquella que no solo
a nivel interpretativo, se abría paso, su aporte en la creación de diversos
temas, como “La Gasolina” y su apoyo, a un sin numero de talentos, como Tego Calderón
en “In The House Magazine” y luego en “En peligro de extinción, lo llevarían al
reconocimiento a nivel mundial.
Con una carrera por recorrer y una vida por
transitar, Eddie Alexander Ávila Ortiz, comenzaría experimentar un mundo sin
sabores, donde los largos periodos alejados de los escenarios, serian el pase
de factura, en una carrera, llena de grandes logros y marcadas diferencias.
Enfrentado con Daddy Yankee, por la
deslealtad del Big Boss, hacia su persona, pese a ser el principal responsable
de muchos de los éxitos de su mitológico disco, “Talento de Barrio”, lo llevarían
a expresar, una y otra vez, sus diferencias con su anterior compañero de
trabajo, que sumadas a su retiro prematuro,
dejarían en el anhelo de sus disco, su tan anunciada producción “El Diario”.
Alejado de los escenarios, ausente de las
redes sociales, Eddie Alexander Ávila Ortiz, es una leyenda que está destinada
a permanecer, a lo largo de la historia en el género.
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