Pocas veces, en la historia de la música latina, sobre todo en el género urbano, una pareja tiene la oportunidad, no solo de compartir voces sino de formar parte de un mismo proyecto de vida en común, tal es el caso de Goyo & Tostao integrantes de Chocquibtown.
Artistas que se conocieron en las mágicas calles del Choco y que luego de un pausa por proyectos personales, el destino los volvería a encontrar, no solo para darle vida a una de las agrupaciones de mayor reconocimiento en América Latina sino también para formar un hogar, aquel que tanto soñaron cuando adolescentes.
Hoy con una hija en común, aquella que le roba los más inspiradores suspiros y con más de 18 años de carrera, Goyo & Tostao son la muestra de que en el mundo de la música pueden haber relaciones amorosas exitosas y es que para los intérpretes de “Desde el día que te fuiste” el compartir una misma pasión, una misma raíces y sueños, ha sido la clave para mantenerse unidos en el tiempo.
“Nosotros somos criados en una comunidad donde es importante el núcleo familiar: nuestros hijos, y cuando digo eso es porque tenemos una hija y Slow (hermano de Goyo y tercer integrante del grupo) tiene dos. Nos cuidamos los unos a los otros. Si yo conozco algo bueno en la vida se lo voy a decir a mi esposa, y lo mismo ella me lo va a decir a mí y yo se lo voy a decir a mi cuñado que, además, es el productor de mi banda y mi compañero de trabajo. El núcleo familiar siempre es importante. Revelarían a una entrevista para la Revista Diners.
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