El 2019, para Tego Calderón, ha sido un año destinado para el olvido, problemas judiciales, quebrantos de salud y un mercado donde predomina los sonidos comerciales antes que la influencia de Reggae, ha condenado al Abayarde, a una especie, de olvido musical.
Ganador de un sin número de Premios, impulsor del Reggaeton en América Latina y protagonista de la secuela más taquillera en Hollywood, Tego, ha logrado durante las últimas dos décadas hacerse con un nombre en la industria de la música, donde es una de sus máximas referencias.
Dueño de un estilo que no obedece a modas musicales ni a patrones definidos, el nacido en Santurce, Puerto Rico, un Primero de febrero de 1972, hoy vive, uno de los momentos más tormentosos en su carrera.
Con una separación que dejo heridas muy recientes, el intérprete de “Chillin” ha intentado dejar a un lado los problemas personales para dedicarse a lo que más sabe hacer, la música y a pesar de no tener en la actualidad un tema promocional sonando en las emisoras de radio, su legado y repertorio musical, puede más que cualquier canción de moda y así lo ha demostrado.
Con una querella judicial a sus espaldas, Tego Calderón, no ha parado en viajar el mundo con sus canciones, show que aunque le dan la oportunidad de conectarse con sus fieles fanáticos, también le han afectado a nivel de salud, donde el pasado primero de Julio, sufrió unas convulsiones durante su regreso de España, situación que gracias al apoyo médico, ya fue superada.
Entre los quebrantos de salud y difícil divorcio, los fanáticos de Tego Calderón, ha visto como una leyenda se apaga ante los problemas.
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